Experiencias...

La persona protagonista de esta historia tiene admitir que le encantan los niñ@s que por muy travies@s que sean con paciencia al final consigue que le obedezcan, eso si, buscandoles las vueltas con mucho esfuerzo e imaginación... porque algun@s han nacido sabiendo más que los adultos. En la mayoría de esos casos, pertenecen a hogares con pocas normas y confunden la obediencia con el ser bueno o malo... Además de tomar como herramientas los gritos y las amenazas... Personas "adultas" que a pesar de su buen estatus social, formación o aspecto físico, son personas con pocos recursos a la hora de educar a sus hijos. 

Esta historia es de hace unos años en una clase con niñas de 4 y 5 años, una de ellas que era una ricura de niña, un poco tímida, pero con unos ojos que además de ser grandes y bonitos producian una ternura especial, iba pasando el tiempo y cada vez notaba que la niña le costaba más irse de la clase, cuando lo habitual es que aparezcan los padres por la puerta y corran a sus brazos... 

Poco a poco veía como estaba más cerca y noto que la niña la quería no como su "seño" sino algo más fuerte y la prueba fue cuando un día le dijo "Seño... yo quiero que tu seas mi mamá"... Imaginarse que frase, que en un principio puede parecer una cosa sin importancia, pero que a la seño le llego hasta el fondo desde el primer momento... Hizo lo lógico abrazarla y decirle que ella solo podía ser su seño, pero que la quería casi tanto como su mamá, pero que su mamá era quien más la quería... La niña le pregunto ¿Entonces mi mamá me quiere más? y ella le contestó  "muchisisisimo máss" Observó en la niña un cambio de expresión al decirle eso y lo asoció a que le debió parecer un rechazo, por lo que quiso demostrarle que no era asi, dándole las gracias y haciéndole ver que le había gustado mucho que se lo dijera... 

Ese día la cosa se quedo asi, pero un día que estaba en clase y había otra niña que no se estaba portando bien vio como se acercó y le dio un pellizco a la niña que se portaba mal y le dijo al mismo tiempo "tan mal te portas que me obligas a darte un pellizco" y automáticamente pensó que esa frase no era casual, que no era de ella, que la había imitado. Empezó a observar más a la madre y sobretodo a la niña... a unir cositas que habían pasado durante el curso en conversaciones o frases que lanzan l@s niñ@s y a los pocos días tuvo una reunión informal con un amigo que es guardia civil y le preguntó como podía actuar sin llamar la atención para asegurarse de si tenía que ayudar a esa niña, antes de hacer una denuncia porque solo eran sospechas y  era consciente de que podía estar equivocada,  no quería alertar a la Directora del Colegio en donde daba las clases extraescolares hasta que estuviese segura, ni a la madre porque si no era cierto le podía hacer daño o meterse en un lio y si por el contrario estaba en lo cierto, que la madre pagara el enfado con la niña. Vamos lo normal que se suele pensar en estos casos cuando no hay evidencias físicas o visibles, solo sospechas.

Por desgracia el guardia civil no dio ninguna solución porque para ellos la ayuda empieza con la investigación y pruebas que aportes en la denuncia, pero la protaganista de esta historia salio de esa reunión con la idea clara de que no podía quedarse de brazos cruzados por lo tanto citó a los padres y madres con la excusa de hablar de la tarea tan difícil de educar a los hijos, entre los temas tratados se mostraron vídeos/ejemplos en los que a veces se pueden perder los nervios, gritar u otras actitudes que no son las apropiadas. No quiso tocar directamente el tema sobre el maltrato ni de como salvar a los niños (aunque era el motivo de esa reunión) pero le dio la vuelta a la "tortilla" y les planteo la posibilidad de crear un taller de padres en el que cada padre/madre expusiera sus dudas ante qué hacer y cómo educar a los hijos (temas que hoy se hablan en las "famosas" escuelas de padres" pero que en aquel entonces no existían) en esa reunión había invitado a un psicólogo que conocía el caso y ambos iban tocando los temas con tacto, pero con la intención de que la persona a la que iban dirigidos cogiese el mensaje aunque no fuese consciente que el motivo de esa reunión y formación del taller era ella y su preciosa hija de casi 5 años. 

La "seño" deseaba que el mensaje le llegase bien y que la madre se diese cuenta que no era tarde para cambiar la actitud... pasaron unos días y el primer día de ese Taller que se propuso en aquella reunión, se presento la madre de la niña 20 minutos antes de la hora acordada y se abrió a la seño y le contó (llorando) que ella no sabía actuar con sus hijos (niño de 7 y la niña) y que a veces les había pegado y que después se arrepentía pero que se daba cuenta que las repetía. La seño no le desveló que ella se había dado cuenta, para no romper el momento de sinceridad y la intención de cambiar, solo le mostro sorpresa/enfado por lo que le estaba contando y le ofreció su apoyo para encontrar un buen psicólogo que le ayudase a corregir esa postura pero le dejó bien claro que ella estaría muy al tanto de su terapia porque quería mucho a su hija y no quería que lo estuviese pasando mal, además de valorar otros aspectos de la madre y decirle que ese tipo de comportamiento no es aceptable para nadie ni en ningún caso, por mal que se porte un niño nunca hay que utilizar la fuerza. 

Pasaron unos meses, estaban a mediados de otro curso escolar la niña ya no estaba en la clase de esta seño, pero la seño seguía el caso desde la distancia y estaba al tanto de todo, de hecho muchos días pasaba por la clase de la niña para ver si había algún detalle que le diese pistas y la verdad que su mirada la encontraba más alegre y "despierta" que antes, además el psicólogo al que fue la madre la tenía informada ya que fue la seño quien la llevo a su consulta, nunca le comento las cosas que le contaba la madre pues ya sabemos que es secreto profesional, pero si que cuando la acompaño el primer día delante de la madre le pidió al psicólogo que le hiciese llegar si abandonaba la terapia o si iba mal... 

Pues bien ya terminando el curso la madre cito a la seño en una cafetería y le agradeció lo que hizo por ella, le reconoció que de no haber sido por esa reunión del curso anterior, quizás hoy sus hijos fuesen niños maltratados, pues por aquel momento eran pellizcos, gritos o apretones de brazos... pero que ella estaba segura que eso podía haber ido a más ya que en aquel momento tambien hacía chantaje emocional y manipulación a sus hijos y que ahora despues de estar en terapia reconocía algunas situaciones pensando en el pasado y se daba cuenta que ya entonces era maltrato y lo que más sentía era que lo peor de todo es que en ese tiempo ella no lo creía así.  

Resumiendo este caso en concreto se puede decir que son personas que deciden formar una familia sin estar preparadas y que aún sabiendo que no lo estan y teniendo la posibilidad de buscar recursos o apoyo para que te ayuden a educar y construir tu familia, les sobrepasa la situación y lo que un día empieza por un acto involuntario o reflejo, se convierte en una costumbre... Y por consiguiente, se convierten en un@s maltratador@s... Otros casos son imitaciones de lo que sus padres hicieron con ellas y en otros casos las cosas van todavía a peor y son palizas y vidas llenas de terror para los niños que las sufren.